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¿Reloj o brazalete? ¡Es un secreto!

En una época durante la cual se creía que no era necesario que una mujer viera la hora, y se consideraba ofensivo que llevara un reloj, los guardatiempos secretos fueron una discreta y brillante solución. Esta propuesta, un favorito de Van Cleef & Arpels, es una pieza atemporal que vuelve en el Rubis Secret bracelet watch, una de las novedades de la marca para 2016. Luego de más de un año de producción y 1500 horas de trabajo podemos admirar y, secretamente, conocer la hora.

 

Rojos rubíes

Conseguir los rubíes exactos para esta pieza no fue tarea fácil. Tuvieron que pasar varios años hasta conseguir las piedras deseadas; siendo Mozambique el lugar de su proveniencia. Allí lograron recolectar 115 rubíes, con un peso total de 151,25 quilates que se igualan en luminosidad, densidad y cristalización. El rojo ideal.


¿Mismo tamaño?

Su similitud en el color no era suficiente. Para lograr la perfección, la igualdad en el tamaño de las piedras también era necesario. Si bien estos rubíes poseen cortes de óvalo o cojín, fueron ajustados y dispuestos en tres filas de acuerdo a una línea sutil de perspectiva, que determinó la forma de la pieza y su ¨igualdad¨ a simple vista para un acabado armónico.


Horas secretas

Cultivando el arte del misterio, el dial donde observará la hora podrá descubrirlo al presionar los rubíes en un lateral del brazalete. El modulo que contiene el reloj se desliza para revelar la hora con una tolerancia de centésimas de milímetro por debajo de las fajas de las piedras, sin tocarlas.


Otros componentes

Los rubíes están colocados sobre oro blanco de 18 quilates; diamantes redondos y cuadrados –para un toque de ritmo a la pieza y acentuar la intensidad de las piedras-; y oro rosa. Este reloj, una pieza única en su haber, posee un movimiento de cuarzo.


 

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